Un día en Cataratas Victoria, Zimbabwe

No era mi primera visita a las famosas Cataratas Victoria. Pero sí la primera vez que las iba a visitar en el mes de Marzo por el lado de Victoria Falls, en Zimbabwe

Mi alojamiento, el hotel The Kingdom, a una distancia en coche de unos 20 mn del aeropuerto internacional, y ubicado en el corazón de esta pequeña ciudad – resort. Su recepción emula al gran rey de los Makisi, y un grupo de danza y música te envuelve a tu llegada. Si aún no has procesado que estás en Africa, te aseguro que después de esta bienvenida ya no lo olvidarás.

Cuando llegué a mi habitación me encontré con una cómoda decoración, muy agradable y acogedora, por supuesto con un toque africano, con comodidades europeas. Ya sé por experiencia que abrir el balcón en estos lugares para salir, respirar aire fresco o el humo de mi cigarrillo, nunca está exento de riesgo, ya que babuinos y monos vervets pasean a sus anchas, y tienen clarísimo que hay muchas posibilidades que al otro lado del cristal haya una cesta con fruta.

Tras instalarme en la habitación decidí que era el momento de relajarse un rato en los jardines del hotel. La piscina invitaba también, pero como yo no soy mucho de piscinas, decidí que era mejor disfrutar de la vista tomando un buen vino en el bar de la piscina, antes de dirigirme al restaurante a disfrutar de una deliciosa cena. El buffet no me decepcionó con una amplia y delicada selección de todo tipo de platos fríos y calientes, incluyendo algunos de comida tradicional de Zimbabwe. Todo relajado, porque me había planificado un intenso día que empezaría temprano a la mañana siguiente.

Mi primera actividad el día siguiente era ver las Cataratas Victoria a vista de pájaro, en un vuelo en helicóptero de 12 mn de duración. Era la primera vez en vida que iba a volar en helicóptero, y unir las dos experiencias, el vuelo y ver las Cataratas a vista de pájaro, me tenía bastante excitada.

Y la experiencia no me decepcionó para nada. Fue excitante!!! Pensé que 12 minutos sería un tiempo muy corto, pero fue tan intensa toda la información que mis ojos recogían, que me parecieron más largos.

La siguiente etapa del día era realizar el recorrido a pie por el Parque Nacional de las Cataratas Victoria. Tras sentir la fuerza del agua desde el aire, tenía claro que iba a terminar bastante mojada!!!! Desde el helipuerto un traslado (incluido con el vuelo en helicóptero) me llevó de vuelta al hotel, y desde allí, en un agradable paseo a través de una densa vegetación, y cruzándome con algún que otro babuino, llegué a la puerta de entrada al Parque Nacional de Cataratas Victoria.

Es muy sencillo seguir la ruta que bordea la falla por las que caen estas espectaculares cataratas, y en un recorrido de algo menos de 2 km, fui parando en todos y cada uno de los miradores desde los que disfrutas de vistas con diferentes perspectivas. La ruta completa, incluida la ruta de regreso al hotel, me llevó aproximadamente 2 horas y media.

De regreso al hotel, una parada en Lookout Café, un clásico en Victoria Falls (Cataratas Victoria): literalmente colgado sobre la Garganta Batoka, donde el río Zambezi fluye embravecido y encajonado en las paredes de esta garganta, ofrece unas vistas espectaculares del Puente de Hierro sobre la Garganta y de la propia garganta. Si sufres de vértigo, será mejor que no mires hacia abajo mientras almuerzas o tomas una cerveza!!!

Y también desde aquí, los busquen que su adrenalina se dispare, pueden hacer tirolina sobre la garganta o saltos al vacío. No para mí, os lo aseguro!!!!

Y después de ver mi adrenalina disparada sólo de mirar hacia abajo desde Lookout Café, qué mejor que un relajante crucero por el Zambezi con un masaje mientras disfrutas de una copa de vino, las vistas del río, y elefantes bebiendo en la orilla e hipopótamos retozando?

Creo que unas imágenes os van a dar mejor idea que cualquier narración!!!